Entrenamiento

Llegué a la zona de entrenamiento, y todo estaba en calma. Por un lado muñecos de practica, por otro zonas libres para correr y por otro un pequeño baño exterior.

-Parece que no hay nadie - miré a todos los lados indignada - Como se lo pueden tomar con tanta calma, deberían entrenar para ser más fuertes, todo esto esta revolucionado, ya no sabe una donde están sus compañeros.

Desenvainé mi zampakutoh, firmemente agarrada con mi mano derecha la extendí apuntando a un muñeco de practicas. Caminé hasta mi objetivo, alcé mi zampa con mi mano y liberé el reiatsu justo cuando golpeé al enemigo. El muñeco cayó al suelo, completamente destrozado. Lo quité de su sitio y coloqué un nuevo muñeco, siempre traía algunos de repuestos, quien algo rompe lo repone.

- Debo practicar más mi Kidoh.

Sin duda en ese campo estaba algo más frágil, nunca se me dió bien el Kidoh. Me pude a una distancia considerable. Alcé mi dedo indice de la mano izquierda, concentré el Reiatsu y pronuncié las palabras.

- Hadou 4 Byakurai

De la punta de mi índice salío un haz de luz que golpeó fuertemente al muñeco dejandolo en cenizas. Volví a reponer el muñeco de prácticas.

- Aun soy débil, debo prácticar más. Quiero que mi Capitana esté orgullosa de mí, que pueda contar conmigo y no fallarle.

Esta vez lo iba a poner dificil.

-Ruge kōsen

Apunté con mi Zampakutoh a un objetivo, concentré mi reiatsu y lo liberé a través de ella. Un potente rayo salió disparado al objetivo, impactó en él de nuevo cayendo en polvo, el suelo ahora estaba quemado completamente, sin duda aquello iba a costar arreglarlo. Esta vez tocaba la velocidad, la aumenté considerablemente, sentía como si yo fuese la creadora de aquel viento que me enlazaba. Fije mi atención en un objetivo, corrí hacia allí. Le pegué una fuerte estocada rompiéndolo por la mitad de nuevo, sin fijarme donde estaba el siguiente objetivo (memoria fotográfica) salté hacia él y volví a impactarle.

Cuando me dí cuenta aquellos rayos que desprendía mi Zampakutoh impactaron en ocho muñecos de practicas que ahora estaban incendiándose.

- No traje suficientes muñecos por lo que veo - miré hacia atrás, hacia los muñecos que había traído, los cuales también se estaban incendiando - Sin duda sigo siendo débil, no logro controlar los rayos que lanza mi Zampakutoh

Tomé un suspiro

-Iré a informar de ello a mi Capitana