Noble insurrección

OFF: Aviso, este tema tiene relación con la trama personal de Galahar Hatake. Como máximo 5 shinigamis, dos tenientes(contando a Galahar Hatake) y tres de menor rango ^^ Respetad el turno de posteo que será conforme vayan entrando los usuarios. Cuando hayan posteado los 5 que vayan a participar haced otra ronda de posteo y luego volveré a postear como Narrador. Gracias!!


Tan solo unos pocos días después del nombramiento de la mayoría de los tenientes las cosas se estaban empezando a calmar hasta cierto punto.

No era la primera vez que se escuchaban ciertos rumores de revuelos en los primeros distritos del Rukongai, los que se suponía que debían ser más tranquilos y seguros se iban convirtiendo poco a poco en un escenario de guerrillas y escaramuzas entre las grandes casas y los comercios de las familias más adineradas de toda la Sociedad de Almas.

Cuatro notas hechas del puño y letra de la capitana del 2º Escuadrón, Hokori Yoruko, había sido enviados a diferentes shinigamis. Una de ellas adjuntada a un informe lo había dejado sobre el escritorio en la habitación de su propio teniente.

"Persónese en la puerta norte del Seireitei al medio día de mañana. Se le informará de su cometido una vez llegue allí.

Hokori Yoruko, Capitana de la 2ª División del Gotei 13"


Distritos 3, 5 y 6 del Rukongai.

Se ha informado de varios movimientos sospechosos en las calles de los primeros distritos del Rukongai. Incendios, atracos y demás actos violentos se están llevando a cabo con mucha frecuencia en los últimos días.

Se sospecha que alguna de las familias de la baja nobleza intenta conquistar el resto de zonas de los distritos con algún propósito oculto. Por ahora las que encajan mejor con los recursos necesarios para llevar a cabo este tipo de acontecimientos son tres:

- La familia Konata: Hace varios años el padre del ahora jefe de este clan, Konata Nambu tuvo problemas con varios shinigamis que encerraron a su hijo por atacar a las fuerzas de recuperación del 4º escuadrón.

- La familia Yoichiro: Tienen un historial de revueltas y varios enfrentamientos con shinigamis en los distritos medios del Rukongai. Yoichiro Makoto es el actual líder de la familia y se trata de un ferviente opositor del monopolio de las familias de alta nobleza sobre las decisiones de la sociedad de almas.

- La familia Mitsuya: Haca varios años hubo una situación bastante tensa entre este clan y la familia noble Hokori cuando la hija pequeña detuvo la ejecución del asesino del primogénito Mitsuya Enoki. Mitsuya Fukuda, actual jefe del clan y padre del difunto se la tiene jurada a los shinigami y a la familia Hokori en particular después de este incidente aunque ningún acto violento ha tenido lugar.

Aquí finaliza el informe sobre la misión. Vuestra labor será averiguar que es lo que está pasando y detener cualquier indicio de revuelta de la manera más pacíficamente posible. No se permite la liberación de la shikai a no ser que sea estrictamente necesario.


¿Qué es lo que está pasando en los primeros distritos del Rukongai? Y aún más importante, ¿quienes serán los shinigamis elejidos para esta tarea? La lucha de un dios de la muerte no es solo contra los hollow, a veces hay que saber cicatrizar las heridas del pasado para llegar listos a la próxima batalla.

Nobles, ¿Qué se les había ocurrido ahora? Esa fue la pregunta que me hice varias veces cuando leí la nota que Hokori había dejado en mi puerta. El estado de la SS era precario, si ahora estallaba una guerra civil el supuesto tiempo que teníamos para lamernos las heridas lo emplearíamos en sofocar la revolución, quedando así en bandeja de plata para los arrancar.
No, no podían producirse ningún tipo te revueltas, si algún noble tenia algún problema con los shinigami tendría que esperar, o mejor aun, olvidarlo. Si no era capaz de hacerlo…bueno, tendría que ejercer mi rango de miembro de la 2º división.
Con esa idea en mente fui al Rukongai.

Caminé con tranquilidad por las calles del distrito 2 del Rukongai, como siempre bien adornadas y con pequeños grupos de gente siempre bien vestidos y con un perfecto léxico, siempre, en apariencia, corteses.
No se si me sorprendió gratamente ver que mi presencia no despertaba ninguna curiosidad, solo aquellos que veían la placa de teniente e la 2ª división en mi brazo parecían desconfiar de mi, pero para la gran mayoría de la gente ver un shinigami por esas calles era normal, como si lo vieran todos los días. Pronto entendí que la gran parte de las familias nobles tenían algún primo, hermano, padre, abuelo, sobrino… en el goitei 13, aunque tuvieran la misma habilidad con la zampakutoh que una rana.
Me obligue a centrarme, recordando la razón de estar allí, y la importancia del éxito en la misión para demostrar a mi capitana que no se había equivocado a la hora de depositar su confianza en mi.

Seguí caminando por las calles, no pude evitar fijarme en el hogar de la familia Mitsuya, yo había matado al primogénito de esa familia en un duelo hace ya tiempo, a pesar de que me suplico por su vida yo no lo había escuchado y le había matado cortando su cabeza.
¿Sentía remordimientos? No, lo único que lamentaba era la posterior situación a la que se había enfrentado Yoruko por salvarme hacia ya tantos años.

Busque algún árbol donde ponerme a la sombra y esperar al resto de shinigamis que vendrían ha esta misión.

Ryohei se dirigía caminando ha paso rápido hacia la puerta norte. Porque demonios le habían enviado aquella carta?

" No entiendo... que querrá la segunda capitana de mi...y los mas importante... porque me ha escogido a mi para una misión "pacifica"?" Ryohei resopló. "Seguro que sera solo hablar con todos aquellos estirados y pomposos nobles... la que me ha caído..." Pero de pronto algo se ilumino dentro de el "Pero para llegar a Capitán he de hacerlo todo al máximo!!"

Así Ryohei se puso a correr por las calles de la sociedad de almas, casi atropellando a varios shinigamis en el proceso..... Así llegó en cuestión de segundos a la puerta en la cual realizó un "frenado de emergencia" casi derrapando y gritó para liberar su energía.

-Si! Siempre al máximo!

Después de gritar miro a su alrededor y vio un hombre "siniestro" en un árbol. Ryohei arrugo las cejas y le saludo con la mano para ver si contestaba.

Washiru caminaba por las calles del Rukongai, con sus dos subordinados detrás. Aquella sería su primera misión como teniente, como cabeza visible de la 9ª división, así que tenía que estar muy atento en hacerlo todo perfectamente y sin ninguna mácula. No solo era una oportunidad para demostrarse a si mismo que valía perfectamente para el puesto, sino también para demostrarle a los demás, que aunque su apellido fuera Kuchiki, su valía no se centraba únicamente en eso.

Así que, tras un largo, aunque agradable paseo por el Seiterei, salió al Rukongai, a las zonas donde se había dado la luz de alarma por la gente que allí vivía y que servía de punto de encuentro y de inicio para los shinigamis que decidían participar en esa misión.

Allí pudo distinguir otro shinigami, quien descansaba bajo la sombra de un árbol.
Por su posición ya llevaba algunos minutos esperando que algún refuerzo llegara para realizar la operación. Justo estaba pensando eso Washiru, cuando pudo distinguir en su brazo, no solo la marca de que se tratraba de un teniente sino el emblema de la 2ª división.

- Buenos días, fukutaichô, venimos a encomendarnos según las órdenes de Yoruko-taichô - Empezó a hablar Washiru en un tono realmente educado. Seguramente aquel teniente tomaría el mando, pues fue su capitana quien había dado la órden de realizar aquella misión. Así que habría que esperar más instrucciones de aquel compañero.

La entropía...principio físico que estipula que todo cuerpo tiende al máximo desorden y al estado de mínima energía,Yosh solo cumplía con la segunda mitad de dicha proposición. Aunque era cierto que se aburría a más no poder y necesitaba algo de acción de vez en cuando, una rebelión de nobles no parecía muy emocionante.

Acusaciones cruzadas, mentiras, engaños, escusas...definitivamente a Yosh esta misión se le antojaba de lo más aburrida, desde luego una mucho mas divertida y digna de hollywood hubiese sido rebelión de nobles hollow.Pero al fin y al cabo,debía cumplir sus órdenes.

Su cabeza se asemejaba a un cocido de pensamientos bajo aquel maldito sol,sin sombras,sin descanso...desde luego exigiría una satisfacción después de aquella caminata.Aquel camino parecía que no terminaba nunca, de no ser por la gran muralla que rodeaba el seireitei ,Yosh se hubiese apostado un brazo a que aquello no tenía fin en este mundo.

-Está decidido, me tengo que comprar un sombrero...

Aquello era lo más coherente que podía pensar en aquel momento, pero por suerte para él, al fin habían llegado a su destino.
El teniente saludó a un individuo que descansaba bajo la muy apetecible sombra de un árbol.

-Si Washiru no hubiese ido tan lento,ahora sería yo el que estaría ahí tumbado- Se lamentaba.

Parecía que el susodicho de la sombra también era un teniente,y aquello era cuanto menos sospechoso. Dos tenientes y dos shinigamis para una "sencilla" misión de conflictos territoriales,desde luego había algo más detrás de todo esto. Y Yosh empezaba a ver en esta misión un filón de entretenimiento.

-¡¡Holaaa!!¡Listo para la acción!-Miró al teniente y saludó del modo más despreocupado que pudo con una amplia sonrisa.

Kiba siguio a su teniente y a Josh por el Rukongai hasta llegar al lugar donde comenzaba su misión.
Ninguno de los tres hablaron durante el camino, el Rukongai estaba practicamente desierto a excepción de pequeños grupos y solo se escuchaba un molesto silencio y algunos murmullos, verdaderamente las cosas habían cambiado ultimamente desde la guerra contra los espadas.
Marchaban tranquilamente, sin prisas. Kiba con ambas manos en los bolsillos y la cabeza baja, iba el último, absorto en sus pensamientos como de costumbre. En lo más profundo de su espíritu esperaba que está misión le diera la oportunidad que llevaba tanto tiempo esperando, la oportunidad de demostrarle a los demás y a sí mismo que era algo más que un simple shinigami raso, la oportunidad de ayudar a los demás y hacer un buen trabajo como shinigami.
Cuando volvio a ser cosciente de donde estaba, vio como su teniente se detenía delante de otro shinigami que se cobijaba bajo la sombra de un arbol, al parecer habían llegado a su destino.
Tras los saludos de Washiru y Josh, Kiba saludo al desconocido haciendo un leve movimiento con el brazo, cuando de repente vio el emblema que lo distinguía como teniente, y no era un teniente cualquiera sino que era el teniente del 2º escuadrón, las fuerzas especiales. No mandarían un miembro de las fuerzas especiales a no ser que fuera un asunto muy delicado, y mucho menos al su teniente, Kiba notó de repente como crecía su ánimo al igual que la esperanza de que aquello no sería una perdida de tiempo.

El tiempo paso bajo la sombra de aquel árbol, en uno de los mejores distritos del rukongai, en una calma que los distritos mas bajos solo se atrevían a soñar.
Apoye mi cabeza contra el tronco del árbol y cerré los ojos, con la intención de reflexionar sobre la estrategia ha seguir con los nobles…tendríamos que actuar con cuidado para no despertar odios entre las diferentes casas nobles, lo mejor seria…
-¡¡SI!!, ¡¡SIEMPRE AL MAXIMO!!- este alarido me obligo despertar de mi ensoñación, abrí los ojos y vi a cuatro shinigamis, uno de ellos estaba casi a mi lado, seguramente era el que había pegado el grito, y los otros tres aun estaban a una distancia aproximada de unos cinco metros.

Incluso a esa distancia pude distinguir al teniente que iba a la cabeza del grupo, su manera de andar por esas calles como si ya las conociera y la seguridad que tenia en si mismo los delataban como Kuchiki Washiru, miembro de la noble casa Kuchiki y para esta misión un estupendo diplomático. Hokiro no podía haber elegido mejor
Ignorando a los shinigamis rasos cruce la distancia que me separaba del teniente, saludándolo con una inclinación de cabeza, pero sin mucha mas ceremonia.

-Supongo que sabes como es la situación- le dije, directo al grano- ¿Alguna sugerencia?- dije con tono de voz cortante, no quería que gastar mucho tiempo en una charla sin importancia. Mientras esperaba su respuesta mire atentamente a los shinigamis que tenía detrás, al parecer eran del 9º escuadrón, los cual supuso un alivio, siempre era mejor tener un par de personas diplomáticas y con dotes de persuasión que un grupo de burros los cuales solo como carne de cañón. Esto me recordó el miembro de la 11ª que ahora se encontraba tras de mi, decidí que yo iría con el, así evitaría cualquier arrebato.

- Realmente no conozco demasiado de las familias nobles bajas - Comentó el teniente ante la sugerencia hecha por su compañero del 2º escuadrón. A pesar de haber nacido bajo el influjo de la familia Kuchiki, no conocía demasiado de la situación que vivía la nobleza en la actualidad, y casi en la historia.
Los nobles que querían llegar a ser shinigamis, sobre todo si querían ser buenos shinigamis, tenían que tener claro que no podían dejarse llevar demasiado por el ambiente noble, el cual estaba mal visto por los dueños de las zanpakutohs. Por eso era por lo que, aun sabiendo bastante de la alta nobleza, sobre todo de la familia Kuchiki, de quienes podría escribir libros, no quería inmiscuirse apenas en los asuntos de las familias de la baja nobleza.

Por lo menos no quería inmiscuirse como noble. Ahora debía de servir como shinigami y era todo un placer poder estar allí defendiendo a la Sociedad de Almas.

- Su capitana fue quien mandó el aviso. ¿Sabe usted algo más de lo que se específicaba, Galahar-fukutaichô? - Preguntó seguidamente al teniente, pues siendo la fuente de información la capitana Yoruko, posiblemente él sabría más.

Además, estaba claro que la segunda división no estaría precisamente falta de información.

[OFF: le tocaba postear a Ryohei no?, bueno continuo que si no esto no avanza]

El presunto teniente del 2º Escuadron se aproximó hacia los tres shinigamis y devolvió el saludo a Kuchiki-fukutaichô ignorando a Kiba y Hideyoshi, lo cual no le hizo mucha gracia a este último dejándolo patente en su cara de alucine.

-Desde luego, la gente ya no tiene educación...- dijo casi susurrando mirando de reojo a Kiba.

El Seireitei no se diferenciaba del mundo real tanto al fin y al cabo.La estructura del Gotei 13 daba pie a la prepotencia por parte de los superiores aunque Hideyoshi esperaba que no todos fuesen como los tenientes presentes.Una cosa era la disciplina y el deber,cosas que conocía bien; y otra cosa era la falta de consideración de la que había sido objetivo.

Mientras reprimía su indignación ante semejante indiferencia que mostraba el teniente del 2º Escuadrón hacia su persona,no pudo evitar fijarse en la apacible sombra que había quedado desocupada al levantarse el anterior susodicho.De modo que comenzó su marcha hacia el árbol soltando una mirada de reojo al causante de su indignación mientras lo sobrepasaba, tras lo que llegó al arbolillo, se sentó y se dispuso a tomar un breve descanso tras la caminata desde el cuartel.

Sin lugar a duda,Hideyoshi sentía cierta debilidad por las sombras de los árboles,y aunque no hubiese mucho césped que se pudiese decir, por el momento aquello era mas que suficiente...

Kiba se encontraba detras de Kuchiki escuchando la conversación de ambos tenientes, en la que al parecer no pintaba nada y a su vez el prefería no meterse. Según lo visto los tenientes de la sociedad de almas se tomaban las cosas demasiado en serio no dignandose ni siquiera a saludar a los dos jovenes shinigamis rasos, al menos de momento solo se trataba de ellos dos. Kiba esperaba que no todos en la sociedad de almas fueran así, si no iba a ser una epoca dura y aburrida para el.
Escucho los murmullos de su compañero y vio claramente que se lo estaba diciendo a él, con lo que Kiba se limitó a asentir con la cabeza, Cualquier día este chico se metera en problemas... y cuando eso ocurra creo que me vere obligado a ayudarlo, al fin y al cabo no aguantaría mucho con estos tipos tan serios sin alguien así... pensaba divertido mientras veía como su compañero acechaba la sombra del árbol con la mirada y tras poco tiempo comenzaba a caminar hacía ella.
Kiba siguio esperando en silencio a que los tenientes decidieran que hacer pero lo más facil sería dividirse en dos grupos y ir a hablar directamente con las distintas familias y intentar arreglar sus problemas de la forma más diplomatica posible.

Me rasque la barbilla, pensativo.

-Seria lo mejor que nos dividiéramos en dos grupos, un shinigami raso y un teniente por grupo, si fuéramos los dos tenientes juntos parecería que el goitei 13 esta atemorizado, lo que seguramente haría que la revolución avanzara mas deprisa.

Mientras hablaba con Kuchiki me di cuenta del gesto de hastío que mostraba uno de los shinigamis rasos, sin embargo tampoco me importo. ¿Es que aún pensaba que el mundo era de color rosa? ¿Es que los tenientes teníamos que ir dando abrazos a todos los shinigamis que viéramos? Decidí preguntárselo a Hokori cuando volviera.

-El- dije señalando al vago shinigami que se encontraba ahora debajo del arbol- y yo iremos primero a la residencia de la familia Yoichiro, vosotros a la residencia Mitsuya, si no tenéis ningún problema.

La razón de esta separación era simple, pues, aunque el sentido común me decía que era yo el que tendría que ir a la casa de la familia Mitsuya, sabia que eso solo haría que la negociación fuera un fracaso, de todas maneras dudaba que esa fuera la casa implicada, hacia mucho tiempo de eso, mas nos valía de no despertar viejos odios.

P.D: Siento la birria de post, no tengo tiempo.

El teniente asintió ante las órdenes de su igual de la 2ª división. Siendo dos grupos irían más rápido, y no dudaba de la eficiencia de un teniente de las divisiones especiales.

A él, no sabía ciertamente si ser noble le iba a ser beneficioso o perjudicial, pero había que organizarlo todo bien. Además, eran dos en el grupo, no estaría bien despreciar el apoyo que podría aportar Arakami-san, que aunque fuera raso, le había causado una muy grata impresión. Seguro que se podía confiar en él.

- Lo haremos lo mejor posible. No dudes en tratar a Iehattori-san como un miembro de tu división. - Le contestó a Galahar, para despues dirigirme al raso de mi división. - E Iehattori-san, deja en buen lugar a la división.

Tras decir aquello, me dispuse a partir hacia la mansión que los Mitsuya poseían en el Seiterei.
Pronto sabríamos como se desarrollaría nuestra primera misión.

El viento soplaba suave y sedoso llevando consigo una multitud de aromas,y como era de costumbre, Hideyoshi disfrutaba de ello bajo una sombra por breve que fuese el momento.

Abrió los ojos y alzó la mirada cuando el recién conocido teniente hizo alusión a él. Parecía que ya tenía compañero de investigación así que sonrió y asintió levemente como respuesta para Galahar-fukutaichô.

Al parecer iban a visitar a una familia un tanto movidita. Según los informes la familia Yoichiro tenía un largo historial de revueltas y enfrentamientos con shinigamis, asi que lo más seguro es que no se alegrasen mucho de su visita, por lo que tendría que mostrar sus "dotes diplomáticas".Aquello podría ponerse interesante.

Kuchiki-fukutaichô se dirigió a nuestro amigo.

-E Iehattori-san, deja en buen lugar a la división.-dijo como siempre serio, pero en aquel momento era lo apropiado.

Hideyoshi se levantó de un salto y se irguió.

-¡Por supuesto Kuchiki-fukutaichô, no le defraudaré!-contestó enérgicamente.
-Galahar-san,cuando desee. Estoy listo para partir.-comentó dirigiéndose al que sería su superior durante esta aventura.

Una vez más, se hizo patente la bipolaridad en el comportamiento de Hideyoshi, vago como solo él puede serlo,y serio y comprometido con la causa cuando se requiere ello de él.

Las cosas por fin parecían animarse y por fin podrían comenzar con su cometido. Así que al final ire con Kuchiki-fukutaichô...genial! Como ya había pensado varias veces durante el día, su teniente debía ser un tipo fuerte y no solo en el combate sino también en lo que a lo diplomatico y astuto se refiere, cualidades que debían demostrar todos los altos rangos de la sociedad de almas y con más razon en la 9º división, al fin y al cabo había llegado a ser teniente...

Volviendose a su compañero Hideyoshi mientras sonreia dijo: Si esto no nos lleva mucho tiempo pronto podremos reanudar nuestro entrenamiento, suerte!
Y rapidamente su sonrisa desaparecio de su cara para mostrar una expresión más seria de determinación:
-Estoy listo para partir fukutaichô.