La sombra, el vicio y la dependencia.(Flashback)

La soledad de la noche caía sobre el desierto como Adria aparecía de la sombra de la rama del árbol. El viento acaricio su melena, y sus ojos capturo cada detalle y movimiento de alrededor, se dejo caer, precipitandose al suelo y antes de caer, con una agilidad felina giro haciendo un mortal hacia atras y cayendo de pie. Ya de pie se busca la cajetilla de tabaco, pero nada, después de buscarse en todos los bolsillos y nada -Pensaba mientras se seguía buscando- Joder, no puede ser..- Cuando busco en el primer bolsillo, allí estaba, sacó el paquete, solo  quedaba uno y ya no se corto para nada y chillo- Me cago en di.., porque no existen maquina de tabaco en esta mier.. de sitio- su drogodependencia se apoderaba de el poco a poco y comenzó a balbucear mientras sacaba un rustico mechero y encendía su ultimo cigarro. Todo era tranquilidad, el humo del cigarro se alejaba hacia el cielo del desierto que salia de la boca, la nariz y el mismo cigarrillo, el alquitrán y la nicotina parecía hacer efecto en el cuerpo de este, se relajo poco a poco, respiraba más relajado y miraba hacia arriba mientras pensó- Demasiado tiempo metido en aquel laberinto...tantas habitaciones, demasiado tiempo demasiado tiempo- Había pasado mucho tiempo desde aquella fiera batalla contra Alastor se había encerrado en su oscuro poder, tan austero en detalles, tan oscuro todo como la misma noche, intrincado como un rompe cabeza, como intentar resolver un cubo de rubik en dos movimientos, la trampa y a la vez el escondite perfecto. Había estado encerrado mucho tiempo y se sorprendió cuando vio que todo había cambiado, Marcus-sama había desaparecido y los pocos Espadas y arrancar que quedaron dirigían todo en El amanecer, demasiado para Adria, el buscaba la tranquilidad en El amanecer, junto a la devastación de humanos y shinigamis en su tiempo libre, pero ya nada seria lo mismo tenia que conseguir más poder y entrar entre los Espadas, no era un sueño o una mete, era su deber, tenia que conseguirlo y sin perder tiempo. Su mente volvió al pasado y cambiaba al presente, una y otra vez, hasta que se quemo los dedos y dejo caer el cigarro a la arena.-Tengo que ir al asqueroso mundo humano a por más de esto y quizas moleste a algún camello que otro - Sonrió mientras pronunciaba sus ultimas palabras, de un sonido volvió a subirse arriba del árbol y miro al horizonte, no había nadie era hora de volver a la acción.